viernes, 23 de enero de 2015

Fin del primer reto.

Hola, por fin, he terminado el libro. Decir que leído en ratos robados y, a veces, obligados por cabezonería. Esta última entrada sobre la iniciación de Allende en la intriga la voy a escribir por partes, a cada rato, para distraer mi atención.

Viernes, 23 de enero.

13:32 h. Aún no he llegado a un tercio del libro y siguen apareciendo nuevos personajes. Aunque aún no he perdido el hilo, mi curiosidad va en aumento. Reconozco el mérito de la capacidad retratista de Allende, pero sigo sin vislumbrar a qué vienen a cuento. Reconozco la línea argumenta - El Juego de Ripper - apenas mencionada a retazos. No dejan de aparecer personajes y yo, tras una hora de lectura, levemente interrumpida por algún cliente, he comenzado a dejarme vencer por el canto de Morfeo. Así que aquí estoy, haciendo un receso (puede que lo que algunos me dicen sea verdad, y no me esté gustando, pero aún creo que no es eso.

20:14 h. Tras más de tres horas de lectura casi continuada, puedo decir que por fin estoy completamente enganchada a la trama. Ya he superado el temido límite del tercio de la obra, con holgura, pero eso indica que no llegaré a conseguir mi fin: Acabar antes de las 23:59 h. El deber manda, y debo hacer un receso, de al menos, hora y media, sino dos. Para ir avanzando y, aunque me está gustando, sigo pensando que la obra peca de un exceso de personajes superfluos excesivamente desarrollados, pero bueno, por ahora sigo con mi consigna del por qué me cuentan esto. Algo bueno, he de suponer, puesto que la intriga está asegurada.

Domingo, 25 de enero.

10:36 h. He leído algo más pero poco, hay otras actividades que hacer. Eso sí, ya os puedo contar que empieza a cerrarse el cerco, la intriga ya casi toca a nuestros protagonistas. Voy a seguir leyendo. (Eso sí, más allá de estos comentarios, no esperéis spoilers, como de quién será el asesino, por ejemplo, eso está feo y le quita todo el interés al libro. ;p


Jueves, 26 de febrero. 

Desisto. No lo consigo. Muy a mi pesar, he de decir que lo dejo no consigo engancharme y eso hace que lo intento. Se me hace muy cuesta arriba, más que cuando me obligaron a leer Platero y Yo en el colegio.

Finalmente, he de decir, que no me ha gustado, no engancha, y es como ver una película de Antena 3 a mediodía, o peor, una de las del verano.


Podéis arriesgaros a leerlo, está bien escrito. A otros gustos por la lectura puede que les enganche, si es así, espero vuestros comentarios positivos sobre el libro.

Hasta el siguiente.

El reto, segunda parte.

Hola aquí sigo, a las puertas de terminar la segunda semana de reto y sin haber conseguido terminarlo.

Esta vez, puedo asegurar, que ha sido la falta de tiempo. Aunque esta mañana, bastante escasa de clientes y habiendo terminado las tareas pendientes de ayer, estoy dándole un "achuchón" fuerte al libro.

En fin, no es muy largo y aún sigo por el principio, aunque puedo decir que ya estoy enganchada. No por una trama totalmente absorbente que hace que devore libros sin piedad durante horas, sino que mi curiosidad innata y malsana hace que quiera saber qué tienen en común todos los personajes y acontecimientos, hasta el momento paralelos y sin relación, cosa que supongo se irá descifrando conforme continúe con mi lectura.

Aún no puedo decir si me gusta o no, aunque sí puedo señalar que la autora continúa con su habitual habilidad para la descripción de personas y lugares. No puedo evitar recordar a mi madre diciéndome que leer a Isabel Allende te transporta automáticamente a las calles de Santiago que describen sus libros anteriores, ya que cuando ve imágenes de la ciudad por la tele siempre comenta su sensación de dejà vu.  

Halagos aparte, los personajes hasta el momento, podrían pertenecer a cualquier novela romántica contemporánea, de esas que me cuesta reconocer que leo sin parar. Las imágenes de los crímenes que contiene y algunos de los personajes no dejan de parecerme instantáneas de cualquier situación inverosímil norteamericana de series de televisión actuales como cualquiera de los CSI o similares que pueblan la programación diaria. Esto hace que esté completamente enganchada a la pregunta que me hago constantemente: "¿cómo se acabará relacionando esto y aquello?"

Fantásticas descripciones después y con el paso de las páginas, supongo que estaré en posición de contestarme y contaros.

Seguimos con la tarea...

Aida, 
guardiana del castillo, paseadora oficial de Sheldon y chófer nocturno ocasional, al menos durante esta semana.

lunes, 19 de enero de 2015

El reto, primera parte.

Como ya sabéis, anuncié en Mi Facebook, mi intención de iniciar este reto. Hoy, diez días después, no he podido cumplir la primera parte, pero bueno, empecemos por el principio.

EL RETO: Leer, al menos, un libro a la semana durante el 2015. (Reto lanzado el 09/01/2015).
PRIMERA SEMANA: finaliza el día 16 de enero. 
PRIMER LIBRO: "El juego de Ripper", de Isabel Allende.


RESUMEN: Tal como predijo la astróloga más reputada de San Francisco, una oleada de crímenes comienza a sacudir la ciudad. En la investigación sobre los asesinatos, el inspector Bob Martín recibirá la ayuda inesperada de un grupo de internautas especializados en juegos de rol, Ripper.
«"Mi madre todavía está viva, pero la matará el Viernes Santo a medianoche", le advirtió Amanda Martín al inspector jefe y éste no lo puso en duda, porque la chica había dado pruebas de saber más que él y todos sus colegas del Departamento de Homicidios. La mujer estaba cautiva en algún punto de los dieciocho mil kilómetros cuadrados de la bahía de San Francisco, tenían pocas horas para encontrarla con vida y él no sabía por dónde empezar a buscarla.»

EDITORIAL: Plaza y Janés. Precio: 22,90 €. ISBN: 9788401342158.
EDITORIAL: DEBOLSILLO. Precio: 12,95 €. ISBN: 9788490623213.



A DÍA DE HOY (19/01/2015), como bien podéis imaginar o sospecháis: No he alcanzado el objetivo. 

Esto no quiere decir que no tenga intención de continuar el reto, simplemente, me he visto en la obligación, auto impuesta, de alargarlo una semana.

Sí, lo empecé, pero no he pasado de las primeras páginas. Como todo lo que mi cerebro procesa como obligación, queda relegado al típico: "Luego me pongo". Además, desastre y desorden patológico el mío, cuando me propongo algo, evidentemente, tiene que estar englobado en unas circunstancias adecuadas: ambiente, momento, orden, circunstancias... algunas las tengo que preparar yo, otras, como podéis imaginar, quedan fuera de mi control. Y nunca se dan todas juntas, pues así estamos.

Vamos a ver, que las circunstancias externas, pues evidentemente, y gracias a la divina providencia, si entra gente a la librería a comprar, no puedo quedarme leyendo. Cosa que agradezco. Eso sí, si el día es muy agitado, cuando llego a casa, lo último que me planteo es ponerme a leer, así que esto es la pescadilla que se muerde la cola.

En cuanto a mi control, pues nada, que necesito una luz auxiliar para el dormitorio, porque quiero leer, no perder del todo la visión. Pero mientras la encuentro. Trataré de cumplir, antes de que pase esta segunda semana, la lectura del libro.

Eso sí, si queréis que me lea algún libro y os lo comente, sólo tenéis que pedirlo.

Hasta más ver.